La actividad física es importante para todos, pero es particularmente importante para las personas con diabetes y quienes tienen riesgo de tenerla. Eso no significa que es necesario correr un maratón o levantar 300 libras. El objetivo es hacer actividad física y mantenerse activo haciendo lo que disfruta.
Es importante mencionar la diferencia entre actividad física y ejercicio.
Actividad física, es todo movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos que tiene como resultado un gasto de energía. Incluye las actividades diarias.
Ejercicio, son movimientos corporales planeados, estructurados y repetitivos que se practican con el fin de mejorar o mantener la condición física. Cuando éste tiene un carácter competitivo, se le conoce como deporte.
La práctica regular de ejercicio tiene múltiples beneficios a la salud, a continuación se enlistan algunos:
Mejora la elasticidad de las arterias, incluso en las personas mayores.
Disminuye la presión arterial en un promedio de 5 a 10 mm de Hg a los 3 meses de entrenamiento.
El corazón se hace mas fuerte y aumenta de tamaño por lo que puede bombear mas sangre en cada latido.
Ayuda a revertir los efectos del tabaco.
Puede favorecer la apertura de los vasos sanguíneos y mejorar los factores de coagulación de la sangre.
Disminuye los niveles de triglicéridos o grasas en la sangre.
Reduce el colesterol total.
Reduce el dolor y la rigidez del cuerpo.
Aumenta la flexibilidad y la fuerza muscular.
El ejercicio aeróbico de bajo impacto también ayuda a estabilizar y fijar las articulaciones.
Mejora la capacidad pulmonar.
Disminuye las infecciones respiratorias virales y ataques de asma.
Ayuda a eliminar o disminuir el daño producido por el tabaco y otros tóxicos.
Se relaciona con el aumento de vigor mental, incluyendo el tiempo de reacción, la agudeza y las habilidades mentales para las matemáticas.
Reduce la depresión.
Proporciona sensación de bienestar.
Combate stress, ansiedad e insomnio.
Reduce la grasa corporal.
Además mientras se ejercita, quema calorías lo que Ayuda a BAJAR de peso o mantenerlo.
Puede añadir más años de salud a nuestras vidas.
Pequeñas mejorías en la forma física ayudan a disminuir el riesgo de muerte.
En las personas con diabetes el ejercicio es benéfico ya que aumenta la sensibilidad a la insulina, esto quiere decir que las células pueden aprovechar mucho mejor la insulina disponible para utilizar la glucosa mientras hace actividad física y después.
Además cuando los músculos se contraen durante la actividad, se estimula otro mecanismo totalmente separado de la insulina. Este mecanismo permite que las células tomen glucosa y la utilicen como fuente de energía, independientemente de si hay insulina disponible. Es así que el ejercicio puede ayudar a reducir la glucosa en la sangre a corto plazo. Y si hace actividad física de manera regular, es posible que también le disminuya la Hemoglobina glucosilada A1c.