Las microinfusoras, también conocidas como bombas de insulina son dispositivos pequeños y portátiles que administran insulina y que sustituyen las inyecciones con jeringa o pluma. La terapia con microinfusora de insulina puede ser adecuada para personas con diabetes de todas las edades cuyo tratamiento sea a base de insulina. La terapia con microinfusora es el tratamiento que más asemeja a la acción de un páncreas saludable.
Con un tamaño similar al de un teléfono móvil, las microinfusoras administran la insulina a través de un tubo pequeño (catéter) y una cánula flexible (denominados equipo de infusión) que se inserta bajo la piel. El cambio del catéter puede realizarse fácilmente desde casa y deberá hacerlo cada 2 ó 3 días. La cantidad de insulina administrada será determinada por un médico capacitado y podrá ajustarse para satisfacer las necesidades de cada paciente. El equipo puede desconectarse fácilmente para bañarse, nadar u otras actividades.
La microinfusora utiliza un solo tipo de insulina (ultra-rápida); una cantidad es administrada de manera continua durante las 24 horas para cubrir la producción basal y mantener niveles de glucosa en sangre en el rango deseado entre las comidas y durante la noche. La otra cantidad que cubre los bolos de alimento, debe ser configurada antes de cada comida.
Para estimar la cantidad necesaria previa a los alimentos deben calcularse algunos parámetros de acuerdo a las necesidades de cada persona como son: su sensibilidad a la insulina, la relación insulina-hidratos de carbono, la duración de la insulina activa y los objetivos de glucosa. Una vez que son configurados estos parámetros, la persona deberá proporcionar dos datos importantes antes de cada comida:
1. Nivel de glucosa previo al alimento (determinado con su glucómetro)
2. Cantidad de hidratos de carbono que va a ingerir (para ello es necesario que el paciente aprenda a contar los gramos de hidratos de carbono contenidos en los alimentos)
Con estos dos datos, la microinfusora estimará la cantidad necesaria de insulina previa al alimento y únicamente será necesaria la confirmación del paciente que se realiza presionando un botón. Es importante aclarar que aunque sea usuario de una microinfusora de insulina, seguirá siendo necesario monitorear los niveles de glucosa a lo largo del día.
Algunas de las ventajas de utilizar una microinfusora de insulina son:
• Dosificación más precisa y previsible – La bomba administra la insulina en unidades precisas, esto ayuda a mejorar la absorción y reducir la variabilidad en los niveles de glucosa. Además de que se pueden manejar diferentes dosis a lo largo del día.
• Mayor flexibilidad, normalización de estilo de vida y sentimiento de bienestar.– La microinfusora puede dar más libertad por la habilidad de cambiar la dosis durante el día de acuerdo con la ingestión de alimentos y nivel de actividad.
• Menor severidad y frecuencia de hipoglucemias- Esto debido a que la insulina es suministrada de manera más lenta y no hay insulina de depósito actuando, además se puede suspender la infusión y por lo tanto lograr que el paciente se recupere más pronto de una baja de glucosa.
• Un mejor control para un menor número de complicaciones- Los estudios sugieren que las personas que utilizan esta terapia están en mejores condiciones para mantener sus niveles de glucosa en sangre en el rango recomendado.
Las complicaciones que se pudieran presentar al utilizar una microinfusora son:
• Hiperglucemia y cetoacidosis si se interrumpe la infusión de insulina o la persona se desconecta por mucho tiempo.
• Lipohipertrofia (inflamación y endurecimiento de la piel, por no rotar los sitios de aplicación de insulina)
• Reacción en sitios de infusión como: urticaria e irritación o infecciones.
La terapia con microinfusora está presente desde 1983, año en que se comercializa la primera de ellas, es una terapia cuyo uso va en aumento y es un recurso que puede ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes. En México existen compañías que tienen a la venta este dispositivo y pueden brindarle información acerca de los costos y beneficios, pero es importante recordar que para poderlo adquirir deberá contar con la prescripción de un médico especialista en Diabetes.
Referencias: Weissberg-Benchell J, Antisdel-Lomaglio J, Seshadri R. Insulin pump therapy: a meta-analysis. Diabetes Care. 2003;26(4):1079-1087. www.medtronicdiabeteslatino.com